Juego educativo que tiene por objetivo comprender la tarea formativa como una responsabilidad compartida entre la familia y la institución, en la que hay roles específicos. Está dirigido hacia padres, madres, apoderados y docentes. Consiste en leer afirmaciones relacionadas con la formación y educación de niños y niñas e indicar si la responsabilidad de cumplir dicha afirmación es de la familia, de la institución educativa o es una afirmación conflictiva(es decir, no se sabe en qué lugar ubicarla), luego de ello se hace un plenario en el cual se generan acuerdos y se sacan conclusiones al respecto sin perder de vista el objetivo de la actividad.
Información técnica
Se sugiere hacer un análisis de este juego educativo en relación al contenido: “El papel de la fundamentación en orientar el diálogo para la resolución de las controversias" de la Subunidad 2: "La fundamentación de los puntos de vista como una vía para la resolución de las controversias" de la Unidad: "La argumentación y la resolución de controversias" del Programa de Estudio "Argumentación" de Filosofía y Psicología.
Un análisis de una temática tan cercana para los/as estudiantes como lo es la responsabilidad sobre su proceso formativo y educativo entre la familia y la institución educativa, pues en proceso en el que todos/as se ven inmersos, genera la posibilidad de adentrar en la importancia de argumentar para establecer quién es responsable de tal y cual procesos formativo y educativo de ellos/as. Por otra parte, es importante que los/as propios/as estudiantes comprendan el objetivo de este juego, que la responsabilidad es compartida entre la institución educativa y la familia, ya que ellos son actor fundamental y también responsables de su formación y educación.