Realidad y desafíos sobre la Educación Rural

De acuerdo con el Directorio Oficial de Establecimientos Educacionales del Ministerio de Educación, el año 2021 se registraron 3.299 escuelas rurales, lo que corresponde a un 29,2% de los establecimientos del país. Según el informe de matrículas, 277.844 (7,7%) estudiantes se educan en este tipo de institución escolar.

Este panorama, es una base desde la cual se establece la Educación Rural, desde ella podemos profundizar en los desafíos y las posibilidades que implica una educación en un contexto fuera de lo urbano. 

La pandemia reveló uno de los desafíos más importantes para la Educación Rural: la conectividad. Para conocer más a fondo esta realidad, la Fundación 99, institución que trabaja para reducir las inequidades con foco en la Educación Rural, realizó un estudio denominado Caracterización de la Educación Rural en Chile en Contexto de Pandemia por COVID 19, en el cual se encuestó a equipos directivos, docentes y asistentes de la educación con una muestra de 1.730 entrevistados. 

El objetivo general de este estudio fue “Caracterizar la experiencia docente de establecimientos educativos rurales y/o en contexto de ruralidad en Chile durante la Pandemia, según problemáticas y recursos a nivel de sistema educacional, establecimientos, docentes y experiencia de estudiantes”. Dentro de los principales resultados, se destacó que un 94% consideraba que la falta de conectividad a Internet es el principal desafío de la Educación Rural actualmente, y que un 34% no pudo hacer clases online ni presenciales desde el cierre de los establecimientos por la pandemia.

Estas cifras impactan en la necesidad y el desafío de asegurar los aprendizajes de calidad de niños, niñas y jóvenes, quienes deben tener las mismas oportunidades de acceso a las experiencias de aprendizaje. 

Julio Arriagada, es profesor encargado de sala multigrado de 1° a 6° básico en la Escuela Estrella de David en Chépica. Nos cuenta que tiene más de 40 años de servicio y que es un apasionado de la educación. Su labor está basada en la vasta experiencia docente que posee, ya que comenta que para quienes ejercen en estos contextos, no hay una formación especial.

• ¿De qué manera enfrentó las clases a distancia?

No tengo internet ni cobertura telefónica, estaba totalmente aislado de los alumnos. Por esta razón tuve que visitar los hogares y conversar con los apoderados, planificando estrategias para lograr un buen aprendizaje. Fijamos horas de estudio y coordinamos visitas en las horas que pudieran recibirme.

• ¿Cuál es la realidad actual de sus estudiantes luego del periodo de confinamiento?

En nuestra escuela retomamos las clases presenciales en septiembre de 2021, y de acuerdo con el diagnóstico aplicado los aprendizajes disminuyeron bastante. Actualmente estamos trabajando en mejorar esta área, con distintas metodologías para cada estudiante.

• ¿Cuáles son los desafíos que se presentan en su aula?

Además de la disminución en los aprendizajes, otro desafío es la parte socioemocional, ya que ha aumentado la agresividad y la falta de tolerancia. En este aspecto, la educación rural tiene la ventaja de un trabajo más cercano con las familias, lo que permite abordar estos temas en comunidad.

Aunque el desafío de mejorar la conectividad a lo largo de nuestro país y principalmente de las zonas más aisladas es un tema urgente para lograr acortar la brecha educativa, la Educación Rural posee ventajas que las y los docentes aprovecharon al máximo en el periodo de pandemia.

Uno de los principales aportes de la Educación Rural, según el estudio de la Fundación 99, es el desarrollo de la identidad local de las comunidades (87%) y el ser un espacio de encuentro de la comunidad (71%). El contacto directo con su entorno permite experimentar un aprendizaje distinto, enfocado en su contexto y los recursos que poseen. 

Respecto a lo anterior, algunos de los factores más destacados es la posibilidad de acceder a una educación más personalizada, lo que permite un mayor desarrollo del aprendizaje colaborativo, considerando la cercanía dentro de la comunidad educativa, lo que impacta directamente en la relación entre docentes, estudiantes y familias, lo que se refleja en la cifra que indica que el 84% de los docentes se comunica semanalmente con sus estudiantes, padres, madres o apoderados.

En el transcurso de la pandemia hemos contactado a docentes de diversas realidades, quienes nos revelaron la importancia de implementar métodos de enseñanza para enfrentar la educación a distancia. Ellos, como muchos otros a lo largo de Chile, desplegaron su creatividad y conocimientos para encontrar la forma de llegar a sus estudiantes y continuar con el proceso de aprendizaje. En esta labor, uno de los métodos más utilizados fue la entrega de material impreso, el cual era retirado por las y los apoderados, e incluso, en situaciones más extremas se hacía llegar este material, junto con las canastas básicas proporcionadas por la JUNAEB. Además del uso de Whatsapp para el contacto directo con estudiantes y apoderados. 

En conversación con Gonzalo Plaza, director ejecutivo de Fundación 99, se devela otra situación compleja en la Educación Rural, y es que, de acuerdo con lo mencionado por el entrevistado, más del 50% de las escuelas rurales son multigrado, lo que quiere decir que en una misma sala hay niños de diferentes niveles y que 8 de cada 10 docentes que ejercen su labor en este contexto no poseen formación para enfrentar esta realidad.

Te invitamos a escuchar el podcast Aprendizaje para el Futuro, donde Gonzalo Plaza profundiza sobre las iniciativas que Fundación 99 está realizando para asumir los desafíos de la Educación Rural.